Definición - ¿Qué significa espionaje digital?
El espionaje digital es una forma de piratería que se lleva a cabo por razones comerciales o políticas. Los ciberespías extranjeros roban información secreta con fines políticos o para diseñar nuevas tecnologías que no tienen el conocimiento para producir por sí mismos. El espionaje digital también se realiza con el propósito de robar secretos comerciales para obtener una ventaja más competitiva o para desarrollar y luego lanzar un producto al mismo tiempo que su fabricante original. El espionaje digital es una amenaza directa para la seguridad nacional en todo el mundo, así como para las empresas.
El espionaje digital también se conoce como ciber explotación o ciberespionaje.
Techinfo explica el espionaje digital
Los piratas informáticos que participan en el espionaje digital a veces llevan a cabo estas actividades por patriotismo provocado por amenazas reales o percibidas o falta de respeto de otros países. La inteligencia gubernamental se ve comprometida cuando los piratas informáticos realizan espionaje digital con éxito porque la información contenida en documentos clasificados puede contener tecnología avanzada o información de defensa nacional. El espionaje digital a menudo ocurre sin dejar rastro, por lo que es difícil saber con qué frecuencia ocurre. A veces, incluso cuando se ha descubierto el espionaje digital, sigue siendo imposible rastrear a las partes responsables debido a las sofisticadas técnicas que han utilizado los piratas informáticos.
Estados Unidos ha frustrado los intentos de Rusia, China y otros países de infiltrarse en las redes eléctricas y otras infraestructuras, como los principales sistemas de agua y alcantarillado. Es fácil imaginar que este tipo de infraestructura, así como las plantas de energía nuclear, las redes financieras, las empresas eléctricas y el transporte se hayan aprovechado ilegalmente a través del espionaje digital. Esto no solo compromete la seguridad de la red empresarial, sino que también debilita la seguridad nacional.
Además del espionaje digital con motivaciones políticas, las empresas han sido víctimas de su cuota de robo de información. Aquí, los competidores roban secretos comerciales e intelectuales para su propio beneficio.