Frecuencia extremadamente baja (elfo)

Definición: ¿Qué significa Frecuencia extremadamente baja (ELF)?

Frecuencia extremadamente baja (ELF) es la designación otorgada por la Unión Internacional de Telecomunicaciones (UIT) para ondas de radio o radiación electromagnética con frecuencias que van desde solo 3 Hz a 30 Hz y con las longitudes de onda correspondientes. Pero en la ciencia atmosférica, a ELF se le asigna alternativamente un rango de 3 Hz a 3,000 Hz. Las señales ELF generalmente se generan por fenómenos que ocurren naturalmente, como rayos y perturbaciones naturales en la tierra. Las líneas eléctricas también emiten ondas ELF.

Techinfo explica la frecuencia extremadamente baja (ELF)

Las frecuencias extremadamente bajas, como su nombre indica, son ondas EM con frecuencias muy bajas, lo que significa que sus longitudes de onda son extremadamente largas. Esto también requiere antenas muy anchas, de aproximadamente 2,175 a 3,700 millas (3500 a 6000 km) de ancho, para crear las señales. Técnicas como el alargamiento eléctrico ayudan a crear estaciones de radio con tamaños más pequeños, pero el requisito de energía para hacer funcionar el sistema sigue siendo bastante considerable, en parte porque los sistemas son ineficientes. Estados Unidos ha creado las dos únicas estaciones ELF jamás creadas, pero fueron desmanteladas en septiembre de 2004.

Este tipo de ondas viajan menos que la velocidad de la luz y pueden penetrar la superficie de la Tierra e incluso el agua salada. Debido a esto, el mejor uso de ELF ha sido para la comunicación submarina con submarinos, ya que las frecuencias más altas no pueden penetrar las propiedades conductoras del agua salada. Sin embargo, la principal desventaja es que la comunicación es unidireccional, solo desde la estación hasta el submarino, esto se debe en gran parte a que una antena ELF sería demasiado grande para un submarino. La señal ELF solo se usó para ordenar al submarino que se elevara a una profundidad menor donde funcionan los canales de comunicación regulares.

Los científicos y biólogos creen que las señales ELF pueden tener efectos negativos en el cuerpo humano, pero hasta ahora la investigación no ha sido concluyente y no se han reportado incidentes de enfermedad provocados por líneas eléctricas que también emiten ELF.